Los agricultores de la zona de Danyang, en la provincia china de Jiangsu, al este del país, vivieron esta experiencia, que fue retransmitida por la televisión china.
Los campesinos abusaron de forchlorfenuron, una sustancia química que acelera el crecimiento de las plantas.
Lo aplicaron sobre los campos de sandía durante el periodo de lluvias y por un tiempo excesivo en relación con el habitual y las consecuencias han sido explosivas.
Las sandías han comenzado a explotar como si fueran bombas. Primero fueron creciendo deformes, rugosas, con semillas blancas, en vez de negras, como es lo normal.
En una mañana explotaron 80 sandías y ya por la tarde la cifra llegó a 100.
Son al menos 20 las cooperativas afectadas por este fenómeno que afecta a 45 hectáreas de terreno.
Los restos de las sandías han terminado en el estómago de los cerdos. Las autoridades chinas no prohíben el uso del forchlorfenuron, que se emplea también en EEUU para el cultivo del kiwi y las uvas.
La investigación en China, sin embargo, ha revelado que se abusa del compuesto químico y se ha criticado el abuso de estos y otros , como dulcificantes y tinturas usados para mejorar la apariencia de las frutas y vegetales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario